Cuando uno rebobina una historia, le puede pasar esto:
Las aves volvieron al huevo en torbellino de plumas. Los peces cuajaron la hueva, dejando una nevada de escamas en el fondo del estanque. Las palmas doblaron las pencas, desapareciendo en la tierra como abanicos cerrados. Los tallos sorbían sus hojas y el suelo tiraba de todo lo que le perteneciera. El trueno retumbaba en los corredores. Crecían pelos en la gamuza de los guantes. Las mantas de lana se destejían, redondeando el vellón de carneros distantes. Los armarios, los vargueños, las camas, los crucifijos, las mesas, las persianas, salieron volando en la noche, buscando sus antiguas raíces al pie de las selvas. (fragmento de "Viaje a la semilla" de Alejo Carpentier( texto completo))
Y si uno ve un vídeo como el que te presento a continuación y pretende contar lo que en él sucede comenzando por el final ... El argumento de la historia es muy lineal así que no te será difícil contarlo, pero al revés.
Entremezclando alguna de las propuestas de Raymond Queneau (ejercicios de estilo) y la propuesta de Alberto Chimal (las historias)
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